La teoría Posestructuralista de Peter Halley

Nacido en 1953, el pintor y teórico del arte norteamericano Peter Halley ha desarrollado una propuesta estética abstracta que si bien en ningún momento trabaja la tecnología digital, sirve como referencia a todas las propuestas abstractas que en el campo del arte digital se han presentado en los últimos años. Mientras estudiaba en la Universidad de Yale tomó las ideas Situacionistas de Guy Debord para sustentar sus teorías pictóricas, pero pronto se decantó por el estructuralismo de Jacques Lacan, Claude Lévi-Strauss, Roland Barthes y Michel Foucault. Esto le ayudó a definir su estilo pictórico, fuertemente relacionado con el abstraccionismo geométrico.

Entre 1984 y 1987 participó en el grupo Neo-Geo, y siguió estudiando a los teóricos de su tiempo, en este caso los posestructuralistas posmodernos Jean Baudrillard y Jacques Derridá. A partir de ese entonces se dedicó a sus pasiones, pintar y escribir. Su estilo se denominó Neo-Geométrico Day-Glo, porque implicaba el uso de colores fosforescentes. Las obras eran totalmente geométricas, inspiradas en Piet Mondrian y César Domela. Parte de su conceptualización era la crítica al capitalismo, y sobre la base de sus ideas marxistas, procedió a postular por escrito sus ideas teóricas sobre el arte y la estética.

Halley pinta haciendo referencia visual a los elementos industriales y tecnológicos, desde el punto de vista abstracto. Ya hacia el año 2000 escribe en Index Magazine, y poco después resume sus textos en dos libros, "Ensayos Seleccionados 1981-1987" y "Diagramas Utópicos". Entre sus textos más famosos está "Crisis de la geometría", en donde formula sus postulados para un nuevo sistema estructuralista que ayude a entender las propuestas artísticas finiseculares. Con su geometría "diagramática" Halley quiere demostrar que la abstracción lejos de ser un puro efecto auto-referencial, expresa la relevancia de los modelos matemáticos en el siglo XX, que se han impuesto en todas las ramas de las ciencias.

Esta concepción cibernética lo acerca a la idea de un mundo digital, y aunque su estética no tiene nada que ver con el ordenador, sí está llena de alusiones a la ciber tecnología: chips, circuitos, pistas... Todas dibujadas en colores brillantes y formas limpias. Es todo un reflejo de su postura posestructuralista, donde la forma debe reflejar ideas, y la línea debe llevar a ideas y concepciones con posturas críticas y humanas: "Yo deseo ayudar al mundo ideal del arte geométrico a que encuentre la vía del paisaje social". Y eso intenta con sus obras. He aquí algunas.