En su libro Teorías del cine (1993), el estudioso italiano Francesco Casetti busca establecer un sistema teórico que ayude a definir y comprender al cine como arte, medio de expresión y comunicación, tomando como base el período histórico que va desde 1945 hasta 1990. Para ello establece una definición general de lo que debe ser una teoría, que se aplique a su propósito analítico. Dice entonces:
"La teoría no se considera un mecanismo formal basado en un número restringido de postulados, en un cuadro conceptual bien definido en modalidades rigurosas de asunción de ciertos contenidos empíricos, sino que es concebida como una conjetura con la que se intenta captar el significado o el funcionamiento de ciertos fenómenos, o, mejor aún, como un modo de ver que comparte una comunidad de científicos y que se considera eficaz. Una teoría, pues, no tiene por qué ser necesariamente una construcción axiomática, pero sí debe ser al menos un saber compartido con el que se intenta explicar el mundo".
Siguiendo esta lógica, Casetti caracteriza una teoría del cine como "un conjunto de supuestos, más o menos organizado, más o menos explícito, más o menos vinculante, que sirve de referencia a un grupo de estudiosos para comprender y explicar en qué consiste el fenómeno en cuestión". Como vemos es una definición bastante genérica, pero que le permite establecer su objeto y forma de abordarlo. De ahí parten todas las amplias consideraciones que aborda en su interesante libro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario