En la publicación anterior hablé sobre a investigación participativa, que es un enfoque de investigación que involucra activamente a las personas o comunidades que son el foco de estudio en todas las fases de un proceso de investigación. Aquí voy a explicar una aplicación específica de este método, en la consultoría para la comunicación organizacional.
La investigación participativa resulta sumamente útil en la consultoría de comunicación organizacional, ya que ofrece una serie de ventajas que enriquecen el proceso de diagnóstico, diseño de estrategias e implementación de soluciones. En esencia, su valor radica en involucrar activamente a los miembros de la organización en la identificación de problemas, la generación de ideas y la evaluación de resultados.
Con este método, al involucrar a los empleados en el proceso de investigación, se obtiene una visión más rica y detallada de la realidad organizacional. Se accede a sus experiencias, percepciones y conocimientos tácitos, lo que permite identificar problemas y oportunidades que podrían pasar desapercibidos con métodos de investigación tradicionales. Esto asegura que las soluciones propuestas estén realmente adaptadas al contexto específico de la organización.
Cuando los miembros de la organización participan en la identificación de los problemas y en la creación de las soluciones, sienten un mayor sentido de propiedad sobre ellas. Esto aumenta la probabilidad de que las acepten, las implementen con entusiasmo y se comprometan con su éxito a largo plazo. Las soluciones no se perciben como impuestas desde afuera, sino como resultado de un esfuerzo colectivo.
La investigación participativa permite identificar las necesidades de comunicación más apremiantes desde la perspectiva de los propios empleados. Esto ayuda a priorizar las acciones y a enfocar los recursos en las áreas donde realmente se generará un impacto significativo. El proceso de investigación participativa en sí mismo puede ser una herramienta poderosa para fomentar la comunicación interna, fortalecer las relaciones entre los miembros de la organización y aumentar el sentido de pertenencia. Al trabajar juntos en la identificación de problemas y la búsqueda de soluciones, se generan lazos de colaboración y confianza.
La diversidad de perspectivas que aporta la participación de diferentes miembros de la organización puede conducir a la generación de ideas más creativas e innovadoras para abordar los desafíos de comunicación. Se aprovecha la inteligencia colectiva y se exploran soluciones que quizás no surgirían de un análisis puramente externo. Al haber estado involucrados en el proceso desde el inicio, los miembros de la organización están más informados y comprometidos con la implementación de las soluciones. Esto facilita el proceso y también el seguimiento y la evaluación de los resultados, ya que existe una comprensión compartida de los objetivos y los indicadores de éxito.
Se pueden destacar, entonces, las utilidades en la consultoría de comunicación organizacional, como se describen a continuación.
1.-Diagnóstico más preciso. Al involucrar a los colaboradores, líderes y stakeholders en el proceso investigativo, se obtiene una comprensión más profunda de los problemas comunicacionales, culturales y relacionales dentro de la organización.
2.-Empoderamiento y compromiso. Los empleados y equipos se sienten parte del proceso, lo que aumenta su compromiso con las soluciones propuestas y facilita la implementación de cambios.
3.-Identificación de necesidades reales. La participación directa evita sesgos externos y permite detectar las verdaderas necesidades comunicativas de la organización, desde la perspectiva de quienes la viven día a día.
4.-Cocreación de estrategias. Facilita el diseño de planes de comunicación más adaptados a la cultura organizacional, ya que se construyen con aportes de los mismos actores interno
5.-Mejora del clima de la organización. Al dar voz a los colaboradores, se fortalece la confianza, la transparencia y la sensación de pertenencia, mejorando el ambiente laboral.
6.-Sostenibilidad de los cambios. Las soluciones generadas de manera participativa tienen mayor probabilidad de perdurar, ya que cuentan con el respaldo y la apropiación de los involucrados.
En definitiva, la investigación participativa en consultoría de comunicación organizacional no solo mejora la efectividad de las estrategias, sino que también promueve una cultura de diálogo y co-responsabilidad.