El digitalismo no ha cambiado muchas de las tradiciones occidentales y ahora planetarias, como la de la Nochebuena, que es la celebración cristiana del nacimiento de Jesus. Es, sin duda, un acontecimiento simbólico, que además en estos tiempos se ha aderezado con toda suerte de otros ritos, desde el "Espíritu de la Navidad" el 21 hasta el paso de "San Nicolas" o "Santa Claus", con su repartidera de regalos. Pero la tecnología digital sí ha transformado algunas cosas, sobre todo en la imaginería y la comunicación de estos rituales. Y ha permitido, además, la universalización de mensajes, deseos y sentimientos... Para bien o para mal. Es la transculturización decembrina. ¡Feliz Navidad!
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